Candidiasis

La insuflación vaginal no se considera un tratamiento de ozono sistémico ya que, a diferencia de la infusión venosa y la insuflación rectal, no existe una afectación directa del torrente sanguíneo o, aunque la superficie de la zona vaginal es considerablemente grande, los efectos locales prevalecen sobre los sistémicos. A diferencia de la técnica rectal, en estos casos es necesario utilizar dosis relativamente altas de ozono que son capaces principalmente de destruir los hongos u otros parásitos presentes en la zona.

Está claro que, evaluando preliminarmente la sensibilidad de los pacientes, la concentración debe aumentarse gradualmente incluso más de 60-70 µg/ml O3/O2 siempre asegurando la tolerabilidad del sujeto a tratar con volúmenes que van desde 50 a 200 ml. Son suficientes de 6 a 15 sesiones seguidas de otras 5-10 sesiones semanales a concentraciones más bajas (30-50 µg/ml O3/O2) para obtener óptimos resultados.